Max Verstappen se corona en Las Vegas: su quinto puesto le vale su cuarto Mundial
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fcfe%2Ff89%2Fb83%2Fcfef89b83c5711f69787bddf1eec2f03.jpg)
Ayer a las 02:27 AM
Max Verstappen lo ha vuelto a hacer. El neerlandés se ha coronado campeón del mundo por cuarta vez en su carrera gracias al quinto puesto que ha logrado en el Gran Premio de Las Vegas, donde los Mercedes se impusieron como ocurrió en la clasificación. Russell ganó, seguido de Hamilon y de Carlos Sainz, que se subió al podio.
El triunfo del neerlandés es un nuevo éxito de Red Bull, que ha sumado los últimos cuatro títulos de forma consecutiva tras aquella mítica remontada protagonizada por Verstappen en 2021 frente a Hamilton. En Las Vegas le bastó con ampliar la distancia con su principal perseguidor, Lando Norris, que concluyó sexto.
El inicio de Verstappen fue duro, con un trabajo en silencio para adelantar a Pierre Gasly. El francés tuvo que defenderse tanto como Russell como Leclerc, en un comienzo marcado por el intento de adelantamiento del monegasco.
El ritmo de Leclerc, sin embargo, bajó bastante y empezó una bonita batalla entre los Ferrari. Sainz iba mucho más rápido que su compañero hasta que se acabaron las cortesías: lo adelantó en la vuelta ocho, provocando el enfado del monegasco.
La perseverancia de Verstappen
Pero los neumáticos de Ferrari se desgastaron con suma rapidez, detalle no poco relevante aprovechado para Verstappen para colocarse en segunda posición. El neerlandés mantenía su ritmo a pesar de la entrada en boxes de Sainz, incapaz de devolverle el adelantamiento.
Fernando Alonso, por su parte, se mantenía en un gran ritmo, superior al esperado por Aston Martin. Tanto fue así que comenzó a hacer varios adelantamientos que lo llevaron casi a la zona de puntos (terminó 11º).
Las instrucciones de Ferrari
La batalla por las posiciones de arriba fue feroz en el ecuador de la carrera. Hamilton achuchó a los Ferrari, liderados por Leclerc, cuyo ritmo era menor que el de Sainz. Tras una parada abortada por su equipo, Lewis se colocó por delante. Todo pintaba mal para Carlos.
Pero todo acabó en una nueva proeza del español, que hizo caso omiso a las órdenes del equipo. Adelantó a Leclerc y más tarde hizo lo propio con Verstappen para concluir tercero. Un nuevo podio que quizá le indica a Ferrari (una vez más) el piloto que han perdido.
Luego llegó la fiesta de Verstappen, radiante por ese cuarto título que lo coloca en el mismo lugar que, por ejemplo, Sebastian Vettel. El binomio que forman Red Bull y el neerlandés continúa dando éxitos.
