Sainz, Roma, Schareina... Arranca un Dakar para volver locos a todos, y con potente Armada Española
01/02/2025 11:00 PM
Cada año, el Dakar abre el candado del panorama automovilismo deportivo. Y como punta de lanza no tiene parangón como universo competitivo y humano en el mundo de las carreras: la prueba más dura del mundo que no pierde tal certificado a pesar de los cambios vividos durante su historia.
Sexta edición en Arabia Saudí, el escenario y paisaje que ha permitido a sus organizadores experimentar y jugar con distintos formatos a medida que se ha ganado experiencia sobre el terreno. La edición 2025 promete sorpresas y un par de sartenazos en la cara de los protagonistas tan pronto salten al ruedo.
👇 The official route of Dakar 2025!🚩 Bisha - Shubaytah 🏁🏍 7,706 km (5,146 km of SS)🚗 7,759 km (5,115 km of SS) 🔜 #Dakar2025#DakarInSaudipic.twitter.com/ImCJH4OClv
— DAKAR RALLY (@dakar) November 28, 2024
“He visto pocos Dakares tan abiertos como este”, pronostica Carlos Sainz, vigente ganador de la carrera. Dos multinacionales como el Grupo Renault (con Dacia) y Ford desembarcan con un extraordinario despliegue de medios para enfrentarse a los veteranos Toyota y Mini.
El mundo de la moto ofrecerá otro despliegue de derroche físico y mental, de coqueteo con el riesgo de una panda de brutales guerreros sobre dos ruedas, con una amplia nómina de marcas y potenciales ganadores, a los que en la distancia seguirán una aguerrida tropa de aficionados cuya victoria será sobrevivir y pasar bajo la meta. Y a través de todas las categorías, una nutrida y potente representación española de gran calidad y con opciones de victoria en sus respectivas categorías.
Lo mejor de lo peor, según se empieza
David Castera lo ha repetido hasta la saciedad: “Será más de resistencia que nunca”. Tras diferentes recorridos desde la llegada a Arabia Saudí en 2020, el director del Dakar ha ido ajustando el tiro y recogiendo las lecciones de anteriores ediciones. Una edición demasiado rápida, otra de navegación excesivamente artificial y enrevesada para enlentecerla… Para esta edición, Castera ha querido apretar las tuercas con un trazado de exigente estrategia y necesario trabajo de equipo para lograr la victoria.
Cuando se habla con los protagonistas, nadie parece querer considerar más allá de la semana inicial. Primero pasarla, y luego vamos yendo vamos viendo. Porque ya en la segunda etapa llega la de 48 horas, dos jornadas en una de competición, casi mil kilómetros, noche sobre el terreno, y sin asistencia. Un torpedo a la caravana ya en la edición 2024, pero que se anticipa para dejar fuera de combate a algún favorito a las primeras de cambio.
Admin checks? Done and dusted! ✍️😎 #Dakar2025 finally starts tomorrow 😱 #DakarInSaudipic.twitter.com/irE8c9BJDD
— DAKAR RALLY (@dakar) January 2, 2025
Táctica, estrategia, y morderse las uñas para no atacar de más serán cruciales. Porque dos días después llega el segundo zurriagazo, la etapa maratón. Luego, en cinco de las doce etapas no saldrán las motos por delante de los coches, por lo que no habrá roderas de dos ruedas que abran pista para los de cuatro. El osado o despistado que abra pista pagará el precio. El año pasado, Nasser al Attiyah se pasó de sobrado y pagó el precio. Y para quien se mantenga vivo la última semana, arena sin descanso en el famoso Empty Quarter. Si el pasado vale para el presente, ganar esta edición será tarea de titanes.
Dacia llega con todo
En semejante escenario, llegan dos grandes fabricantes para recoger el testigo de Audi, que se despedía en 2024 de su trienio dakariano. Una victoria ‘in extremis’ y casi ya entregada de Carlos Sainz y Lucas Cruz salvó la cara a una brillante y compleja aventura tecnológica. Ahora, una de las marcas comercialmente más punteras del Grupo Renault, Dacia, entra en el Dakar para elevar el perfil de la marca. Lo hace con gran presupuesto, y acogiendo otra montura, el Hunter que usaba hasta ahora Prodive en el Dakar.
El Sundrider ha sido pasado por el cedazo de un intenso programa de pruebas, ahora rebautizado con el nombre de un modelo de la marca,por aquello de la obligada identificación con el producto, que para eso se va a las carreras. Eso sí, con un equipo de postín: el cinco veces ganador, Nasser al Attiyah, y el mejor palmarés en la historia de los rallies, Sebastian Loeb, aún férreo en su determinación para lograr el último gran objetivo de su trayectoria que se le escapa un año tras otro.
Y como tercer espada, en femenino, nada menos que la española Cristina Gutiérrez, quien se ha abierto camino en el mundo de los raids a base de perseverancia y talento. No en vano es la segunda piloto oficial femenina de la historia de la prueba, también la segunda en ganar etapas y una categoría. La burgalesa, a la estela de la mítica Jutta Kleinschmidt.
Sainz y Roma, adalides del recién llegado
Conservadora y tradicional en los últimos años en el mundo del deporte, Ford vuelve a lo grande gracias a la confianza de su cúpula en el valor del deporte como banderín de enganche. Junto al programa con Red Bull en la Fórmula 1 a partir de 2026, la marca americana ha querido también conquistar el paisaje opuesto con su proyecto en el Dakar. Dos pilotos españoles y sus respectivos copilotos (Lucas Cruz y Alex Haro) juegan el papel de lazarillo para el fabricante americano, que ha elegido para ello la estructura de M-Sport, su brazo armado durante años en el Mundial de Rallies.
Nani Roma cogió ese bastón de guía desde el pasado año, aportando toda su experiencia para crear desde cero el Ford Raptor T1+, cuando solo era un boceto en los ordenadores. Carlos Sainz llegaba con gran parte de la tarea avanzada, y se unía a una estructura ya familiar para él tras despedirse de Audi. Llegó con el arsenal de su brutal experiencia técnica, y la obsesión por el detalle y la precisión de comportamiento de una máquina de carreras.
Desde Ford y sus pilotos se destila una inusual confianza en una máquina recién parida, pero solo desde el punto de vista del comportamiento dinámico. Ahora resta confirmar cómo aguantará el Raptor la tunda de verdad, cuando se descubre que la preparación previa de todo un año se convierte en un juego de niños ante la realidad de la carrera más dura del mundo.
Wait until the end! 😂And you, are you more or less ready? Drop your score from 1 to 10 in the comments! 🔢#Dakar2025#DakarInSaudipic.twitter.com/oZmBrOzZv6
— DAKAR RALLY (@dakar) January 2, 2025
Los guerreros de la moto, la gran épica del Dakar
En la categoría de moto, KTM y Honda se enfrentan con su espectacular armada de pilotos, con Hero y Sherco a meterse por los resquicios. La marca nipona, con la gran esperanza española para volver a ganar el Dakar. Tosha Schareina llegó en tromba a la prueba con ese nivel propio de quien acaba siendo un elegido. Rápidamente, fue fichado por la marca japonesa gracias a su espectacular rendimiento. Tras Nani Roma y Marc Coma, algún día será el tercero.
Eso sí, con la motivación en 2025 de sacar la espina de la pasada edición, cuando tuvo que abandonar en la primera jornada por un absurdo accidente tras una espectacular temporada en la Copa del Mundo. Lorenzo Santolino, oficial de Sherco, será otra de las bazas españolas para colarse entre los cinco primeros de la general gracias a su consistencia y experiencia. Ya sabe cómo hacerlo.
Ricky Brabec (ganador de la última edición) Ross Branch (segundo el año pasado), los hermanos Quintanilla, Adrien Van Beveren, Daniel Sanders, Skyler Howes, José Ignacio Cornejo... Todos protagonizarán un apasionante Dakar, como en cada edición. El resto en dos ruedas, vivirán su propia odisea para llegar, el mejor de los trofeos.
Con la curiosidad en 2025 de que dos de los grandes de la categoría, Toby Price y Sam Sunderlam, cuatro victorias en total, justificaban su paso de las dos a las cuatro ruedas (con un Toyota Hilux, después de que sus baqueteados cuerpos no dieran para más. “Estábamos en un campamento de entrenamiento y después de un día difícil con la moto, enfrentándonos a toneladas de rocas, en el frío pensamos: ‘¿No sería mejor ir en coche, bien protegido?”, explicaba Sunderlam. "Cuando ya estaba retirado de las carreras de motos, (Price) me envió un día un mensaje preguntándome si quería subirme a un coche con él. Le dije: “Venga’. Y aquí estamos”.