Carlos Sainz se encontrará un equipo Williams obligado a "romper con todo" después de "15 años sin inversión"

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Carlos Sainz saltará de Ferrari a Williams en pocas semanas.

El piloto español de Ferrari, Carlos Sainz, disfruta de sus últimas semanas como miembro de un equipo consolidado tras años de trabajo. Sin embargo, su nuevo destino, Williams, vive un momento radicalmente distinto que necesita de mucha paciencia.

Carlos Sainz se va a embarcar en un proyecto que le resultará algo familiar por lo vivido hasta el momento en la Fórmula 1.

El piloto madrileño debutó en Toro Rosso, un equipo destinado a desarrollar los jóvenes talentos de Red Bull. Posteriormente, pasó a Renault y luego a McLaren, dos estructuras históricas en proceso de recuperación tras años de escasa o errada inversión.

«Necesitas una cultura en la que el fracaso sea completamente aceptable. Yo fallo la mayoría de los días»

La primera en manos de Lotus y Genii Capital, la segunda tras un periodo de inacción por parte de Martin Whitmarsh y Ron Dennis. Renault recuperó el equipo, pero casi 10 años más tarde sigue sin encontrar el rumbo, mientras que Zak Brown ha sido capaz de devolver a McLaren al lugar al que pertenece por historia.

Ahora es el turno de Williams, y James Vowles es el encargado de hacerlo realidad. Pero no será fácil ni tampoco rápido, ya que el equipo ha vivido un largo periodo de penurias económicas que acabaron por instaurar una economía de supervivencia y, por tanto, nula inversión.

Williams, 15 años a la deriva

De todo ello ha hablado el propio James Vowles, que ha sido designado capitán del barco y, por tanto, tiene ante sí una tarea hercúlea.

Y el hecho de que Carlos Sainz vaya a unirse al proyecto en 2025, no implica necesariamente que Williams esté preparado para pasar al siguiente nivel y empezar a luchar por cosas importantes.

James Vowles, director del equipo Williams

«Cuando tienes una organización que no ha sido financiada de la manera adecuada durante varios años, normalmente terminas con bastantes problemas de infraestructura que solucionar, problemas de personal y problemas culturales que también surgen de ello», introduce James Vowles.

«La verdadera solución para esto es —y dije estas palabras el primer día que me uní a la organización— romper con todo, y eso es realmente lo que estamos haciendo».

«No se trata de poner una tirita o hacer una pequeña cura. Vamos a volver a los cimientos absolutos, asegurándonos de que tenemos a la gente absolutamente adecuada», prosigue, dejando claro que la reconstrucción de Williams es más que una simple reforma.

Williams conserva la fachada, pero todo lo demás tiene que ser reconstruido o renovado. «Eso significa contratar a los mejores y más brillantes, y capacitarlos. Para darles una idea, dimos la bienvenida a 110 jóvenes en el inicio de sus carreras».

«La organización está formada por 1000 personas, si eso no les dice lo que estamos haciendo para el futuro… es un plan a 10 años antes de que realmente brinde fortaleza, pero ahí es donde estamos poniendo nuestra inversión», reitera Vowles.

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Una nueva cultura para Williams

A lo largo de más de una década, la Fórmula 1 ha evolucionado y Williams se ha quedado atrás. Esto no sólo ha generado un déficit estructural y financiero, sino también cultural.

«Necesitas una cultura de cambio continuo. Lo que hiciste ayer ya no es suficiente. No se trata de la infraestructura tecnológica que tengas. Lo crean las personas y la cultura que estás impulsando. Nosotros lo hacemos. Lo desarrollamos», apunta James Vowles, antes de profundizar en el tema.

«Sigue adelante, asegúrate de que estás impulsando la innovación. Y esa es una palabra que, para mí, no es sinónimo de un pequeño desarrollo, sino más bien de un cambio tecnológico que estás implementando y que cambia el deporte o el mundo. Son palabras muy, muy importantes, pero eso es lo que significa la innovación para mí», prosigue.

James Vowles afirma también que en Williams necesitan asumir el fracaso como algo completamente normal, pues sólo de ese modo la innovación comenzará a fluir y ofrecer resultados.

«Para llegar allí, necesitas una cultura en la que el fracaso sea completamente aceptable. Yo fallo la mayoría de los días, pero ocurre porque estamos llevando todo al límite».

La época gloriosa de Williams queda ya muy lejos. ¿Será capaz Vowles de recuperarla?

«Así que, mientras tengas una cultura en la que no exista la culpa, pero lo que es más importante, puedas aprender de cualquier fracaso que hayas tenido y mejorar a partir de él, podrás comenzar a obtener este impulso que se forma a continuación», afirma el ingeniero británico.

Finalmente, James Vowles recuerda que Williams cuenta con una historia sólo al alcance de Ferrari, por lo que la perspectiva de devolverlo a lo más alto tiene para él un valor incalculable.

«Williams es el segundo equipo más exitoso de la parrilla. Incluso hoy, sólo Ferrari ha tenido más éxito. Así que, cuando a finales de 2022 me llamaron para unirme a una organización tan poderosa, una organización en la que quizás durante 15 años no se había invertido al nivel adecuado, pero que tenía mucho potencial, fue una decisión fácil, Y eso que vine del equipo más exitoso de la parrilla [Mercedes]», concluye.

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