Fernando Alonso dice 'basta': "Necesito parar y cuidarme un poco"

Hoy a las 03:53 AM

El piloto de Aston Martin, Fernando Alonso, admite que la temporada más larga de la historia de la Fórmula 1 le ha pasado factura y necesita recuperar un físico que ha sufrido mucho en las últimas semanas.

Fernando Alonso está llegando muy justo al final de una temporada histórica para la Fórmula 1, aunque no por las razones que a muchos de sus protagonistas les gustaría.

Por primera vez, el campeonato tendrá una duración de 24 grandes premios, una cifra que está dejando exhaustos a muchos y que se completará este próximo fin de semana en Abu Dhabi.

Pero, una vez que todos los pilotos crucen la línea de meta el próximo domingo en el circuito de Yas Marina, el trabajo no habrá terminado todavía. Y es que aún quedará completar el test de Pirelli que se celebrará el martes de 10 de diciembre en ese mismo emplazamiento.

«El coche se confunde y piensa que sigue detrás del coche de seguridad, aunque hayas cambiado los ajustes»

Un test al que Fernando Alonso ha decidido no acudir, ya que las últimas semanas ha pasado por bastantes dificultades físicas.

Estas salieron a la luz al conocerse que el asturiano sufrió problemas gastrointestinales en México que afectaron al español también en São Paulo. Además, en ese mismo gran premio, Fernando Alonso tuvo que hacer frente a fuertes dolores de espalda a consecuencia del rebote del Aston Martin a alta velocidad en una pista tradicionalmente bacheada.

Se le agotan las pilas a Fernando Alonso

Todo esto ha acabado afectando al piloto asturiano y, a diferencia de lo que suele ser habitual en él, ha decidido no participar en el test de postemporada en el que se probarán los neumáticos de 2025.

«No es un secreto que he sufrido físicamente durante cuatro carreras», reconoce Fernando Alonso. «Parece que ahora ya he salido del pozo, me he sentido bien. Ya me sentí bien en Las Vegas, pero necesito parar y cuidarme un poco».

Lo cierto es que los problemas físicos no han afectado en absoluto al piloto de Aston Martin a la hora de rendir al 100 %, ya que tanto en Las Vegas como en Qatar volvió a demostrar que sigue siendo el de siempre.

En el circuito urbano estadounidense, Fernando Alonso se quedó a las puertas de los puntos tras quedar eliminados ambos Aston Martin en la Q1 el día anterior. Y en el trazado árabe finalizó en una meritoria séptima posición, devolviendo al equipo a los puntos tras cuatro ceros consecutivos.

«Desde Singapur no puntuábamos y estábamos soñando con hacer un noveno o décimo cuando los cuatro grandes acaban la carrera, pero hemos conseguido un séptimo cuando se han presentado las oportunidades», celebraba Fernando Alonso en la noche del domingo.

Un problema irresoluble

El séptimo puesto de Fernando Alonso llegó a pesar de un serio problema que el piloto español lleva sufriendo dos temporadas y que, tras el primer coche de seguridad, le hizo bajar de la octava a la 12ª posición.

«Sabemos lo que pasa. Desde el año pasado, en las primeras vueltas de carrera o de resalida, el coche se confunde y piensa que sigue detrás del coche de seguridad, aunque hayas cambiado los ajustes», explicaba.

«Cuando aceleras con la bandera verde no tienes la potencia eléctrica, no tienes 'deployment' y estás en una jauría de coches sin 160 CV durante los primeros segundos de la aceleración».

«Conocíamos el problema, pensábamos que estaba solucionado, pero en la primera resalida lo hemos vuelto a tener porque perdí tres posiciones», lamentaba Fernando Alonso.

Afortunadamente, el ritmo de carrera fue bueno una vez desaparecido el problema, y el último coche de seguridad ayudó al asturiano a ganar alguna posición más, ayudado por una acertada estrategia de Aston Martin.

«Me lo preguntaron en el último sector, para mí era arriesgado parar otra vez y adelantar porque en este circuito es difícil adelantar una vez pierdes posiciones. El equipo lo tenía más claro, si hubiese sido por mí no habría parado. Así que hay que darles crédito, han hecho un buen fin de semana», contaba Fernando Alonso.

No en vano, sus ingenieros le hicieron parar dos veces en boxes mientras el Safety Car estaba en pista. La primera, para cumplir con el mandato de poner los neumáticos duros, ya que había comenzado con medios. La segunda, para colocar nuevamente un juego de medios nuevos y tener ventaja sobre sus directos rivales en las últimas 15 vueltas de carrera.

Una jugada que salió a la perfección y que dio como resultado un séptimo inesperado. «Hemos mejorado el coche desde el Sprint, hicieron una buena estrategia y no se dieron por vencidos después de varias carreras en las que el coche no ha ido bien. Hay que intentar mejorar y acabar con una nota positiva en Abu Dhabi», concluye.

Y después a descansar para volver al 100 % en 2025.