Marcus Armstrong recala en Shank sin renunciar a los vínculos con Ganassi

Ayer a las 02:00 PM

El joven neozelandés cambia de aires a raíz de la reducción forzosa de coches en Ganassi, y ocupa el segundo asiento en Shank, que tendrá asociación técnica a partir de 2025 con su ex-equipo. Ocupa la vacante de David Malukas, rumbo a Foyt.

Uno de los asientos libres más codiciados en la parrilla de IndyCar es el segundo coche de Meyer Shank Racing, y no solo por el sólido rendimiento demostrado por esta formación en 2024, liderada por un Felix Rosenqvist que les brindó su mejor posición final en la tabla con un 12º lugar, cimentada en un gran inicio de año. Su asociación técnica con Andretti Global concluye al término de la temporada, pero será reemplazada por un vínculo similar con los vigentes campeones Chip Ganassi Racing que anticipa buenos augurios. Desde allí, precisamente, proviene su nuevo piloto para el segundo coche.

Pese a que Mike Shank, propietario del equipo, aseguró que la elección de piloto no vendría condicionada por su nuevo socio, este puesto ha acabado finalmente en manos de Marcus Armstrong, quien ha pilotado el coche #11 para Chip Ganassi Racing en las dos últimas temporadas. El piloto neozelandés de 24 años ocupa el hueco dejado por David Malukas, que llegó a mitad de temporada tras su propio despido en McLaren para reemplazar al relegado Tom Blomqvist, y que el próximo año competirá para A. J. Foyt Racing mediante un acuerdo tácito con el Team Penske.

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«Mike Shank y Jim Meyer me causaron una gran impresión cuando les conocí. Su pasión y su ética meticulosa de trabajo era obvia desde nuestra primera conversación, y quiero darles las gracias a ambos por esta oportunidad», afirma Armstrong, que este año logró su primer podio con una tercera posición en el Gran Premio de Detroit. «Este año me acercé más a donde quiero estar en cuanto a rendimiento, sobre todo en mi debut en óvalos, y estoy deseando subir en el escalafón junto a Shank. Queremos estar al frente peleando por victorias, y creo que tenemos la receta para hacerlo».

Armstrong llegó a IndyCar en 2023 tras sus tres temporadas en Fórmula 2 con ART, Hitech y DAMS, terminando todas ellas en 13ª posición, con cuatro victorias en carreras sprint y solo el primero de sus ocho podios (en su debut) en una prueba principal. Anteriormente había sido campeón de la Fórmula 4 italiana y tercero en Fórmula 3. Su talento siempre había venido acompañado de los amplios recursos de su familia, los cuales le permitieron subirse a un cuarto coche de Ganassi que solo funcionaba mediante financiación externa, reemplazando a todo un Jimmie Johnson.

Malukas ha disputado las últimas 10 carreras en el #66, siendo 18º en puntos en ese periodo.

Esa financación no cubría toda la temporada, y Armstrong se centró en un programa de circuitos, que complementó Takuma Sato en óvalos con dinero de Honda. No fue un año brillante, con solo cinco top 10 en 12 carreras y sin pasar del séptimo puesto en clasificación o carrera, pero la cosa mejoró notablemente en 2024, donde ya se enfrentó al calendario completo con la ayuda complementaria del patrocinio familiar de su nuevo compañero Kyffin Simpson. Su podio en Detroit se vio complementado con otros tres quintos puestos (cuatro contando la prueba no puntuable de Thermal), y su séptimo puesto en la final de Nashville fue su mejor resultado oval, aunque su debut en la Indy 500 duró apenas seis vueltas por un problema mecánico.

Todo ello permitió a Armstrong acabar en la 14ª posición de la general, batiendo de forma notable por 19 puntos y dos posiciones al novato Linus Lundqvist, que ocupaba el tercer coche 'pata negra' de Ganassi, y cuyo anterior piloto Marcus Ericsson quedó a su vez a un punto de Armstrong compitiendo con Andretti. De media, clasificó ligeramente mejor que el venerado Dixon; sus mejores clasificaciones fueron dos terceros puestos en Road America y la segunda carrera de Milwaukee, las mismas en las que Lundqvist también tuvo sus mejores puestos de salida, pero en ambos casos los dos pilotos tuvieron colisiones al inicio. En la primera, Armstrong se llevó puesto a Lundqvist cuando defendía la pole; en la segunda, un error de Lundqvist en salida abortada hizo que Armstrong se viera implicado en un choque múltiple.

Su salida de Ganassi, y en parte también la asociación del equipo con Shank, viene a raíz del próximo sistema de 'charters' que se instaurará en 2025, en el que cada equipo (salvo los recién llegados Prema) recibirá un estatus de franquicia con diferentes ventajas financieras, pero asociado solo a un máximo de tres coches por equipo. Habiendo alineado cinco esta temporada, y ante el riesgo de que dos de sus coches tuvieran que batirse con Prema por meterse en parrillas limitadas a 27 coches, Ganassi ha optado por reducir su formación a tres coches, creando en su lugar un equipo en Indy NXT. Aunque aún no es oficial, en el tercer coche se quedará el caimanés Kyffin Simpson, tan verde en rendimiento como el color de la inifinidad de billetes que aporta la petrolera de su padre.

Otras vacantes, otras incógnitas

Armstrong retendrá al menos la asociación con Ganassi a través de Shank, pero no se puede decir lo mismo de Lundqvist, que no aporta dinero y que bien se puede quedar sin asiento en otros equipos. El sueco hizo su debut con Shank en varias carreras de 2023 y había sido postulado como un candidato claro para el asiento, pero el buen rendimiento de Armstrong parece haber decantado la balanza para un equipo que habitualmente no ha dependido de patrocinios, pero al que no le vendrá mal los de su nuevo piloto ante la pérdida de uno de sus dos principales socios comerciales, AutoNation.

A partir de ahora, las principales opciones disponibles en la parrilla residen en Rahal Letterman Lanigan Racing, tras la marcha de Christian Lundgaard y sin que la continuidad de Pietro Fittipaldi esté asegurada. Eso sí, el equipo quizá tenga otras cosas en las que pensar ahora, después de que su sede en Zionsville, Ohio, recibiese este miércoles una incursión del FBI a raíz de una supuesta situación de espionaje industrial que involucra a un empleado que trabajaba anteriormente para Andretti. Fuera de esa telenovela y de la eterna incógnita de los dos Coyne, quedan también los dos coches de Juncos y el segundo asiento de Carpenter. Otros, como el segundo Prema, el Carpenter #20 o el tercer Ganassi solo están a la espera de anuncio.