Un ex de Audi lo confirma, un error histórico en el segundo R8 privó al mundo de un deportivo revolucionario

https://static.motor.es/fotos-noticias/2024/12/audi-r8-2024105559-1733073507_1.jpg

El Audi R8 coqueteó con la mitad de cilindros del motor V10 pero fue desechado.Motor.es

Cuando apenas han pasado unos meses de la desaparición de uno de los superdeportivos más deseados, sin sucesor en el horizonte, al menos a corto plazo, ahora se confirma que un Audi R8 con motor de cinco cilindros existió. La marca alemana lo descartó por un sólo motivo más que estúpido.

Los errores se cuentan por miles en los departamentos de desarrollo de las marcas, pero mucho más en las juntas directivas que son los encargados de decir sí o no al lanzamiento de los nuevos modelos. Todos los fabricantes han cometido errores pero, ahora que han pasado unos meses de la desaparición de un mito entre los deportivos como es el Audi R8, se ha sabido de uno de los mayores errores de la marca relacionado con este modelo.

La primera generación del Audi R8 se lanzó al mercado con dos versiones, una básica con motor V8 de 4.0 cilindros biturbo y el más radical y prestacional con el mismo motor atmosférico del Lamborghini Huracán, un V10 de 5.2 litros que se quedó como única opción posible en la segunda y última generación. Sin embargo, la marca alemana también experimentó con una arquitectura más ligera, la del RS 3 Sportback.

El motor del Audi RS 3 Sportback es una joya de la ingeniería deportiva.

Un Audi R8 con el motor del RS 3 Sportback existió... como prototipo

Marcos Marques, uno de los responsables hoy del programa de desarrollo de e-fuels en Porsche, lo ha contado en una entrevista con un medio británico, al ser uno de los que participó en aquel desarrollo. La gran diferencia no estaba solamente en el motor de cinco cilindros y 2.5 litros TFSI de 400 CV, sino también en la transmisión, una manual de seis velocidades.

Ya puestos, también se eliminó el sistema de tracción quattro, convirtiéndose en un propulsión trasera. El premiado motor de cinco cilindros, que anima a las versiones más radicales de los compactos de la marca alemana, es mundialmente conocido por su elevado rendimiento de serie pero que, con mínimas mejoras, puede aumentarse mucho más.

Un ejemplo claro es el del Donkervoort F22, en el que rinde nada menos que 500 CV. Aquel planteamiento fue desarrollado para la segunda generación, utilizando como mula la carrocería del primero, y lo vimos en fotos espía aunque entonces se pensó más en un bloque V6.

El prototipo del Alfa Romeo 33 Stradale brilla en sus últimas pruebas, un superdeportivo nacido para la gloriaLeer noticia

Una oportunidad perdida en Audi que habría sentado cátedra

El propio Marques en unas declaraciones ha apuntado que «Fue una pena, porque el motor turbo de cinco cilindros era un motor potente, sonaba diferente y creo que funcionaba bien en el R8. El coche también era más ligero y ágil, pero quizá algunas personas de Audi Sport no pensaron que se sintiera como un R8 real, así que bastante tarde decidieron que el coche no iba a salir adelante».

La «excusa» del sonido se podía haber arreglado, pero el gran error fue el pensar que ya existía un deportivo con tal configuración: un TT RS manual pero con la importante diferencia de que su motor estaba colocado delante y de forma transversal. Ha pasado mucho tiempo desde entonces, fuentes australianas se han puesto en contacto para confirmar o desmentir esta información de un «baby-R8», pero el portavoz se ha encargado de echar el balón fuera.

De haber sido una realidad, Audi habría causado un verdadero daño a las marcas rivales, pues ninguna se había atrevido a ello. Cualquier cosa que no fuese un V8 era un sacrilegio, pero hoy Mercedes vende su AMG GT con motor de cuatro cilindros y menos de 500 CV de potencia. El de la estrella tiene caché y la marca lo que quiere, en estos casos, es dinero. Está claro que se equivocaron en Audi.

img

Top 5 Inicio

×