¿El regreso del Cactus? Citroën reconsidera el futuro del C4 apostando por lo simple y barato

01/02/2025 04:00 AM

Citroën ya ha pasado por esto antes. La marca francesa, que no contaba con un heredero del C4 al considerar que el compacto ya estaba bien respaldado por otro par de modelos, ahora estaría dispuesta a cambiar de opinión si puede dar un vuelco tan importante como el que supuso el del antiguo C4 Cactus.

Se podrá estar más o menos de acuerdo en que Citroën se haya convertido en una marca de coches de bajo coste, pero es algo que está dominado a la perfección, como también lo hacen con los coches más pequeños del mercado. Una de las grandes especialidades del fabricante francés que ahora se encuentra en una nueva tesitura de cara a los próximos cinco años.

La pasada primavera te contábamos una realidad en el seno del fabricante: los días de esta tercera generación del Citroën C4 estaban contados, a pesar de que entonces no se había presentado aún el lavado de cara previsto. La firma de André Citroën había empezado a trazar las líneas maestras de la gama del futuro y el compacto no tenía cabida en sus planes.

Caber, cabe un C4 entre los dos Aircross pero no es «aconsejable»

El crecimiento experimentado por el nuevo C3 Aircross, y que el futuro C5 Aircross será un modelo más contenido, desaconsejaba la introducción de otro entre medias, pues estaba claro que uno de este trío estaba destinado a fracasar llevándose por delante miles de millones de inversión. Una circunstancia a la que se sumaba otra más casi igual de importante o más: la carga tecnológica de un compacto es superior a la de un utilitario.

Aunque pudiera parecer que esta última es un problema, no lo es tanto porque Citroën ya demostró que ofrecer un modelo bien equipado y a un precio justo es posible. El C4 Cactus nació con esa premisa y fue un verdadero éxito comercial, a pesar de que rebajase el nombre de un compacto a un nivel inferior.

A ello se ha referido Thierry Koskas, al señalar que «Lo que hemos dicho sobre el segmento B y la necesidad de coches con el nivel adecuado de equipamiento algún día se aplicará también al segmento C», añadiendo que «las familias están interesadas en la amplitud pero a un precio razonable».

El C4 Cactus, el ejemplo del «Bueno, bonito y barato»

La plataforma «Smart Car» del nuevo C3 fue desarrollada por la empresa india Tata Consultancy Services para las marcas baratas de Stellantis, fijando primero un precio y luego asignando un presupuesto para componentes individuales. De esta manera, se sabe desde un primer momento cuánto se puede gastar sin restar rentabilidad.

Es el mismo principio que ha usado Dacia, y el que le ha llevado al estatus del que disfruta ahora mismo. Por eso, Koskas está convencido de que un nuevo C4 es posible, pero atendiendo muy cuidadosamente al equipamiento: sólo lo que los clientes utilizan habitualmente.

El galo comparte uno de los grandes problemas de la industria, y en el que pocos se fijan, salvo la marca rumana: «El precio de los automóviles está aumentando, pero la cantidad de dinero que la gente puede invertir en un automóvil no. En el caso de los coches eléctricos es aún peor, porque se quiere que la gente compre coches más caros, por lo que volver a un producto bien equipado pero sencillo es algo que consideramos necesario».