Uno de los padres de la transición verde en Europa critica a diestro y siniestro a cuenta del coche eléctrico
Ayer a las 11:30 AM
El que fuera vicepresidente de la Comisión Europea entre 2014 y 2023, Frans Timmermans, ha criticado duramente a los fabricantes de automóviles, pero también a los gobiernos nacionales por su actitud ante la transición al vehículo eléctrico.
Frans Timmermans, uno de los artífices del ambicioso Pacto Verde de la Unión Europea y exvicepresidente de la Comisión Europea, ha lanzado una dura crítica sobre la gestión de la transición ecológica en Europa.
Timmermans, ahora líder de la alianza neerlandesa entre los Verdes y el Partido Laborista, advierte que la falta de solidaridad y apoyo a las clases más vulnerables podría descarrilar el esfuerzo por combatir el cambio climático.
«La derecha radical llega y explota muy hábilmente este sentimiento de angustia personal»
El excomisario señaló que la primera ola de subsidios públicos para fomentar el uso de energías renovables y vehículos eléctricos benefició principalmente a los más ricos, quienes fueron los primeros en adoptar estas tecnologías.
«El dinero público fue a parar a gente que realmente no lo necesitaba», lamentó Timmermans, quien hizo una llamada a redirigir los recursos hacia las clases menos favorecidas.
Según él, la transición ecológica debe organizarse con un enfoque de solidaridad, similar al sistema fiscal, donde quienes tienen más recursos contribuyan en mayor medida.
La industria automotriz en el ojo del huracán
Timmermans también criticó con dureza a la industria automotriz europea, acusándola de haber desperdiciado una década mientras países como China y Corea lideraban la revolución de la movilidad eléctrica.
En un contexto de creciente competencia por parte de los fabricantes chinos de vehículos eléctricos asequibles, el neerlandés rechazó las peticiones de los grandes fabricantes europeos de ralentizar la transición hacia los coches eléctricos.
Frans Timmermans, exvicepresidente de la Comisión Europea e impulsor del Pacto Verde«La industria automotriz estuvo durmiendo durante 10 años mientras China y Corea reinventaban la movilidad eléctrica, luego se quejaban del hecho de que no podían competir y dijeron: "Bueno, la forma de competir es ralentizar la transición"». Además, Timmermans alerta de que los chinos «acapararán el mercado» si Europa no acelera el paso.
Aunque reconoció que la falta de incentivos y de infraestructura adecuada para vehículos eléctricos ha sido un problema, el político neerlandés subrayó que esta responsabilidad recae en los gobiernos nacionales «que arrastran los pies», no en los legisladores de la UE.
Para contrarrestar esta situación, pidió seguir el ejemplo de Estados Unidos, que ha invertido miles de millones de dólares en apoyar a la industria y a los consumidores en la adaptación a las nuevas tecnologías.
Impacto social y político
Timmermans también vinculó el descontento social con el auge de partidos populistas en Europa. Según él, la transición ecológica, unida a la alta inflación y el aumento de los precios de la energía, ha generado una sensación de inseguridad entre los ciudadanos, especialmente entre los más vulnerables.
Muchas familias pobres han reducido su huella de carbono por «amarga necesidad en lugar de porque hayan abrazado la idea». En contraste, las clases altas, aunque están adoptando soluciones ecológicas, mantienen hábitos de consumo con una alta huella de carbono.
Este panorama de incertidumbre, según Timmermans, ha sido explotado por partidos de derecha radical que prometen soluciones sencillas pero deshonestas. «Es el mismo problema en todo el mundo occidental: la suposición de que nuestros hijos van a estar mejor que nosotros ha desaparecido. Y entonces te vuelves muy protector de lo que tienes».
«La derecha radical llega y explota muy hábilmente este sentimiento de angustia personal para decir "te llevaremos de vuelta a la década de 1950". Es un mensaje político inherentemente deshonesto porque conducirá a la decepción».
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El exvicepresidente de la Comisión Europea ha instado a los responsables políticos a no retroceder ante las críticas y a mantener el rumbo en la lucha contra el cambio climático.
«Estamos atravesando una revolución industrial a una velocidad tres o cuatro veces superior a la de las revoluciones industriales anteriores y, por lo tanto, corremos el riesgo de sufrir más interrupciones que en revoluciones industriales anteriores», ha apuntado.
En este contexto, Timmermans enfatiza la necesidad de fortalecer la colaboración europea y proporcionar incentivos paneuropeos para la transición ecológica, aunque lamenta que líderes como Olaf Scholz bloqueen iniciativas como los eurobonos, que permitirían financiar este esfuerzo colectivo.
La transición verde, según Timmermans, no es sólo una cuestión ambiental, sino también una prueba de solidaridad y cohesión social en Europa. Si no logramos que esta transición sea justa, con los ricos pagando más, «los votantes europeos la detendrán», concluyó.
