Akio Toyoda revela secretos del futuro MR2 y Celica, Honda tiene motivos serios para preocuparse
Hoy a las 03:00 AM
Toyota sigue dando que hablar. Los japoneses han conseguido su objetivo después de haberse cerrado las puertas del Salón de Tokio 2025, donde, entre sus novedades, se encontraba un GR Yaris más que especial. La mula del futuro MR2 sigue siendo noticia, ahora al filtrarse un interesante documento que descubre nuevos detalles.
Si no es por las declaraciones de los ejecutivos que han hablado en el Salón de Tokio, no sabríamos todo lo que encierra el GR Yaris conceptual que han revelado en la gran feria japonesa. Lo que se ha reflejado en la información oficial es una mínima parte de lo que realmente esconde en sus entrañas esta mula del futuro Toyota MR2.
Ya sabemos cómo funcionan los técnicos de GAZOO Racing cuando a las órdenes se encuentra alguien como Akio Toyoda. El GR Yaris M Concept es un pedido especial del Sr. Morizo, como se le conoce en el ámbito de la competición, y uno de los ingenieros con más experiencia que se conocen, capaz de hacer fácil lo difícil.
La filtración de un diagrama del Toyota GR Yaris M Concept explica detalles técnicos del futuro MR2.Toyota explica la ingeniería detrás del futuro MR2 … y Celica
Aunque Toyoda no ha dado las explicaciones de lo que se encuentra en el interior de este GR Yaris modificado, sí se ha encargado de que el mensaje llegue a través de un emisario. Naohiko Saito ha sido el elegido para contar en una entrevista lo que se empezará a probar el próximo mes de julio en circuitos nipones.
Sobre estas líneas, un diagrama estructural refleja lo que el equipo de desarrollo tiene guardado tanto para el futuro MR2 como para la nueva entrega del Celica. El equipo de ingenieros japoneses decidieron trasladar el motor de cuatro cilindros y 2.0 litros de tapa roja a la parte trasera, primero porque delante no cabía y segundo porque, de haberlo mantenido delante, la distribución del peso le llevaría a un subviraje continuo.
Trasladar el motor ha sido tan relevante como instalar un diferencial en la parte trasera que envía el par motor a las ruedas delanteras. Saito explica que el diferencial con el que el GR Yaris cuenta actualmente en la parte trasera ahora se encuentra en la delantera.
El vano delantero del GR Yaris M Concept sólo acomoda el diferencial delantero y la refrigeración.La tapa roja de un motor de altas prestaciones en Toyota
Los japos confiesan que esta configuración ha sido testada con el bloque de 1.6 litros turbo del actual GR Yaris, señalando que «sus características son excelentes. Debido a que tiene motor central, es más ágil que el actual GR Yaris, lo que hace que conducir el automóvil sea más divertido».
El nuevo motor de cuatro cilindros y 2.0 litros turbo pertenece una nueva familia de propulsores. Su tapa de culata de color rojo es un indicio de que no es un motor normal, sino más salvaje. Y es que la versión más básica rendirá una potencia máxima de 300 CV (400 Nm) y la más elevada el doble, aunque también habrá una versión intermedia, ya confirmada con 400 CV y 500 Nm.
Esta última es la que irá a parar al vano motor del futuro Toyota Celica, como ha confirmado el propio vicepresidente Nakajima, cuyo desarrollo ya ha comenzado. Sin embargo, una característica común de los dos nuevos deportivos es que contarán con tracción a las cuatro ruedas.
La idea del Sr. Morizo de intercambiar la parte delantera y trasera del GR Yaris va más allá del sentido común. Abruma tanto ingenio
Fuentes de Toyota han confesado que se enfrentan a un enorme desafío, que pasa por la refrigeración. El sistema de enfriamiento se encuentra en la parte delantera, con un circuito que arranca desde el radiador y al no estar compensados los pesos entre ambas secciones, ya auguran problemas. Dado que ya es lo suficientemente cargada con el motor, la solución pasa por tirar de aerodinámica.
Los especialistas de GAZOO Racing en este campo, con Saito a la cabeza, estudian un efecto difusor como el de la Fórmula 1 para generar presión negativa sin crear resistencia en la parte trasera. Una carga que podría generarse de forma artificial y no natural, a través de un sistema embarcado en el coche.