Inyectores del coche: qué hacen, cómo funcionan y síntomas de problemas

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Los inyectores son un componentes vital en un motores de combustión interna. Son los responsables de pulverizar el combustible necesario dentro del cilindro para que se produzca la combustión.

El motor de un coche es como el cuerpo de una persona: Necesita «comida» (combustible en este caso) para poder funcionar. Pero ojo, que no admite ese combustible, ya sea diésel o gasolina, de cualquier manera. ha de entrar en la cantidad exacta, combinada con aire. Ahí entran en acción los inyectores del coche.

¿Cómo son los inyectores del coche?

Son pequeños pulverizadores (como los de un perfume o un ambientador) que rocían combustible dentro del motor. Deben dosificar la cantidad exacta y mezclarla con aire para que el motor queme el combustible de forma eficiente.

El inyector convierte el combustible en una especie de niebla fina. Así se mezcla mejor con el aire y la mezcla arde de manera controlada. Como decíamos, ha de ser la cantidad exacta de combustible ya que en caso contrario, habrá problemas:

  • Demasiado combustible: El coche gastaría (y consumiría) mucho más.
  • Poco combustible: El motor perdería fuerza.

¿Cómo funcionan los inyectores del coche?

Llegados a este punto hemos de indicar que hay diferentes tipos de inyección en el coche, un trabajo que antes de la llegada de los inyectores electrónicos hacían los antiguos de carburador. Pero en líneas generales realizan un trabajo parecido.

La centralita del coche (que viene a ser el ordenador central) indica a los inyectores la cantidad de combustible que debe enviar al cilindro y en qué momento hacerlo. Es entonces cuando el inyector abre una válvula microscópica y dispara el combustible pulverizado en milésimas de segundo.

Imagina una pistola de agua. Si le das al gatillo un poco, sale un chorro fino. Cuando aprietas rápido y fuerte, sale más agua y llega más lejos. El inyector hace lo mismo, pero calculado al mililitro en función de los diferentes parámetros que calcula la centralita.

Inyectores diésel, inyectores de gasolina y de GLP

El gasóleo que queman los motores diésel tiene una mayor densidad energética. Además en esos propulsores la combustión es más lenta, pero más completa, lo que permite un mayor aprovechamiento de la energía del combustible.

Esas diferencias en la naturaleza de las mecánicas se trasladan a las diferencias de los inyectores:

  • Inyectores de gasolina: Suelen estar en la culata (la «cabeza» del motor), apuntando hacia los cilindros (donde ocurre la explosión). Por lo general da menos problemas y los motores modernos ya emplean la inyección directa.
  • Inyectores diésel: A veces están directamente dentro del cilindro. Trabajan a presiones mucho más altas que los de gasolina, lo que permite una atomización más fina del combustible y una mezcla más eficiente con el aire. En los modelos más nuevos ya emplean tecnología piezoeléctrica.
  • Inyectores GLP: Con el mismo principio de funcionamiento que los inyectores de gasolina, la mayor diferencia es que el GLP tiene un mayor volumen en relación con la dosis específica de gasolina (de ahí que sean más grandes).

Problemas comunes en inyectores

Como cualquier otro componente de tu vehículo, pueden darse una serie de fallos y problemas en los inyectores del coche. Estos son algunos de ellos:

  • Obstrucción: Los orificios finos de los inyectores pueden taponarse con impurezas, afectando a la pulverización del combustible.
  • Carbonización: Muy relacionado con el anterior. La carbonilla del proceso de combustión se acumula en el motor y el resto de piezas involucradas, creando obstrucciones y provocando fallos difíciles de detectar y de resolver. Es más común en motores de inyección directa.
  • Fugas y goteo: Si hay fugas de combustible pueden provocar un aumento en el consumo de combustible y problemas de arranque.
  • Desgaste de componentes: Tanto los anillos de sellado como las bobinas de solenoide pueden deteriorarse con el tiempo.

Obviamente, puedes hacer una inspección visual tú mismo, intentando localizar fugas o daños externos en los inyectores y sus conexiones. No obstante, en un taller podrán realizar pruebas para comprobar la pulverización y el caudal de los inyectores, así como leer los códigos de error mediante un escáner OBD y dar con el problemas específico.

Síntomas de problemas en los inyectores

Obviamente, detectar esos problemas no es sencillo, pero sí que hay una serie de síntomas (que pueden presentarse de forma individual o combinada) que pueden indicar deterioro en los inyectores del coche en mayor o menor grado. Estate atento si te ocurre algo de esto:

  • Luz de advertencia del motor: Si ves el testigo de fallo motor en el cuadro de instrumentos iluminada esta puede ser una de las causas.
  • Pérdida de potencia: Si notas un descenso considerable en la potencia o se limita la velocidad máxima.
  • Vibraciones y tirones: Percibes que el vehículo da tirones en marcha, titubea al acelerar o incluso llega a pararse.
  • Dificultad para arrancar: Te cuesta encender el coche, sobre todo en climas fríos.
  • Aumento del consumo: Aprecias un incremento notable en el consumo habitual.
  • Color del humo raro: Ves cómo por el tubo de escape sale humo negro o blanco, especialmente al acelerar. El humo blanco puede significar fugas de combustible y el negro es señal de una mala combustión, posiblemente debido a una pulverización incorrecta.
  • Ruidos anormales: Escuchas sonidos extraños de mayor o menor violencia que vienen del motor.
  • Olor a combustible: Percibes un fuerte olor a combustible mientras se circula.
  • Ralentí irregular: El motor funciona de manera inestable cuando está en reposo.
  • Fallas en los cilindros: Notas un funcionamiento irregular en uno o más cilindros.

Si se observa alguno de estos signos, es recomendable llevar el vehículo a un taller especializado para su diagnóstico y reparación.

Prevenir fallos en los inyectores

¿Por qué pueden fallar los inyectores, más allá de un desgaste de piezas con el tiempo y el uso? Principalmente por tres motivos

  • Combustible de baja calidad: Puede contener impurezas que obstruyen los inyectores.
  • Mal mantenimiento: En este punto es de vital importancia el cambio regular del filtro de combustible, para evitar que partículas dañen los inyectores.
  • Problemas eléctricos: Conexiones defectuosas o cables en mal estado afectan al funcionamiento de los inyectores.

Es posible prevenirlo usando combustibles que contengan aditivos de limpieza y lubricación (la mayoría en España), cambiando filtros con la regularidad que indique el fabricante y realizando las revisiones periódicas a tu vehículo que incluyan componentes relacionados, como bujías y sistema de admisión de aire.

Aditivos de combustible

Existen también aditivos para combustible para mantener los inyectores limpios. Están diseñados específicamente para eliminar depósitos de suciedad, mejorar la eficiencia del motor y reducir emisiones. Podemos distinguir dos tipos, según su función.

  • Aditivos preventivos: Se utilizan con regularidad para evitar la acumulación de suciedad en los inyectores y mantener el sistema limpio.
  • Aditivos curativos: Están pensados para solucionar problemas específicos, como obstrucciones o depósitos ya formados en los inyectores.

Su función es eliminar depósitos de carbonilla y residuos, tanto en inyectores como en el sistema de alimentación. También lubrican componentes clave como válvulas o cilindros.

Dos recomendaciones finales: Elige productos específicos según el tipo de motor (diésel o gasolina) y sigue las instrucciones del fabricante respecto a la cantidad y frecuencia de uso.

Reparación y precio de nuevos inyectores

La reparación o sustitución de inyectores puede ser costosa. Puede oscilar entre los 250 hasta 1.500 euros por inyector en casos extremos. Has de sumar a los costes de la reparación (unos 150 euros por inyector, el coste del diagnóstico inicial y la mano de obra (que varía mucho según la marca del coche y dónde lo repares).

En coches nuevos se suele recomendar la limpieza de inyectores a los 100.000 km y luego cada 50.000 km. Obviamente, depende del vehículo y las condiciones de uso de cada uno de ellos. Existe también la limpieza ultrasónica, un método profesional bastante efectivo.

Fuentes: DieselDB, Intake Cleaning, Ancel, Baileysdiesel

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