No es prioridad para Porsche y Lotus, pero Lamborghini sigue adelante con su primer eléctrico "por un buen motivo"

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El Lanzador será el primer eléctrico de Sant'Agata Bolognese antes de 2030 y no corre peligro.Lamborghini

Lotus y Porsche se han visto obligadas a cambiar de táctica para evitar una importante debacle con los coches eléctricos. La estrategia de la alemana y británica contrasta con la de los toros italianos, que persiste en su idea de revelar el Lanzador antes de 2030 diferenciándose de sus rivales por un target especial.

Hace, aproximadamente, cuatro años que las marcas de volumen y las de prestigio asumieron que la electrificación absoluta era tan obligada como la transformación total de su gama de productos. Casi a diario conocíamos una marca que ponía fecha a la conversión total, pero está claro que algunas fueron más inteligentes y trazaron sus estrategias apostando por diferentes tecnologías.

Hoy, se está demostrando cada vez más que aquel movimiento estaba destinado a llegar a un suicidio colectivo que acabaría con fabricantes históricos. Lotus ha sido uno de los que se ha visto a rectificar al ver el futuro más que negro, una rectificación a la que también se ha visto obligada a sumarse la icónica y más deportiva marca alemana. Porsche también ha reconocido que cambiará de táctica, y que ya estudia introducir motores de combustión en sus eléctricos.

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Pero Lamborghini no es una de las que se sumará a esta iniciativa. Los italianos ni se han pasado por la cabeza la opción de retrasar el lanzamiento de su primer coche eléctrico y no sólo no están convencidos de ello, sino que también han explicado por qué no tienen que hacerlo. La situación de Lamborghini es muy distinta de Lotus y de Porsche, ya que la italiana ha sido fiel a sus principios.

Stephan Winkelmann, director general de Lamborghini, ha señalado que «Tenemos tiempo suficiente para decidir si acelerar o retrasar la introducción de los coches eléctricos. De momento no pensamos en retrasar nada, dijimos que queremos lanzar nuestro primer coche eléctrico a finales de esta década, y es algo que seguiremos promoviendo, porque dijimos que debe ser un coche adicional, el cuarto modelo».

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El alemán ha añadido que «Será un modelo adicional, tendrá un nuevo estilo de carrocería, será un nuevo tipo de coche en general y esto atraerá nuevos clientes a Lamborghini», convencido al máximo de que el Lanzador no sólo será el cuarto modelo de la gama, sino un modelo codiciado entre los coleccionistas y que jugará un papel muy singular.

La diferencia entre Lamborghini y Lotus es mayor que con Porsche, pues los italianos no han cometido un craso error: el de desarrollar plataformas exclusivamente para coches eléctricos. La marca italiana está más que satisfecha con haber apostado por los PHEV, con los que han reforzado enormemente el carácter de los Temerario, Revuelto y Urus.

Un trío explosivo que lo será aún más en el futuro, porque Lamborghini no ampliará su gama de coches eléctricos más allá del Lanzador así porque sí. Este llegará en 2030 y la tercera generación del SUV deportivo llegará después de 2035, el límite impuesto por Europa para que todos los coches nuevos sean eléctricos. En verdad no tienen prisa porque su salvación son las baterías. La mayor potencia de estas permitirá aumentar el rendimiento y también la autonomía eléctrica por mucho tiempo.

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