Mejor la venda antes que la herida o por qué este puede ser un año muy largo para Alonso

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"Hoy en día no hay secretos en la Fórmula 1con los datos del GPS y cómo cada equipo maneja el coche". Carlos Sainz aludía a Aston Martinantes del Gran Premio de Baréin, la apertura del campeonato de 2023. El equipo británico se atrevió a rivalizar con Ferrari ya en la pretemporada de Shakir.

"Sabíamos que iban a ser rápidos, es cierto que les ganamos en la clasificación, pero en la carrera esperamos estar a su altura o que tengan una degradación menor que nosotros". Sainz anticipó el rendimiento de Aston Martin para esa primera carrera por los datos del equipo italiano tras la pretemporada. Alonso terminó tercero, por delante del propio Carlos.

Aston Martin reprodujo aquella pretemporada en el gran premio con exactitud casi milimétrica. El extraordinario primer tercio de 2023confirmó las inesperadas expectativas levantadas por el equipo verde en febrero. Aquel año se correlacionó el rendimiento de la pretemporada con las primeras carreras.

Si ocurre de nuevo este año, el estado de forma de la pasada semana en Shakir anticipa un duro comienzo para Aston Martin, quien sabe si extensible a toda la temporada. Mejor ponerse venda y atenuar cualquier expectativa, porque la herida tiene pinta de ser grave.

"Es como un sueño"

En la pretemporada de 2023, Alonso sumó el mayor número de vueltas acumuladas (270), aunque la ausencia de Stroll concentrará en el asturiano gran parte del trabajo. El primer día, terminó segundo, tercero al día siguiente yel viernes llevó a cabo la segunda mejor simulación de carrera. Siempre arriba. Había que frotarse los ojos, pero confirmar en el primer gran premio, también en Shakir.

Ya en condiciones iguales para todos, el viernes, Alonso llevó a cabo la mejor simulación de carrera tras Red Bull. El domingo, quinto de parrilla. De aquí el aviso de Carlos Sainz.Lo de Aston Martin iba en serio. El domingo, Alonso fue tercero a la estela de los Red Bull y por delante del Ferrari de su Sainz.

"Era demasiado bueno para ser verdad, en cada sesión y cada salida del coche. En la clasificación, nuestra expectativa era estar a medio segundo de Red Bull. Así que fue bastante correcto", resumió un eufórico Alonso al terminar en el podio. "Es como un sueño". Hasta los Países Bajos, el español y Aston Martin se hincharon a podios, incluso casi cayó la victoria en Mónaco. Eran señales muy opuestas las enviadas estos días que, de tener ahora su correlación, anticipan un duro arranque para Aston Martin en 2025.

El paisaje ha cambiado desde entonces. Es cierto que Aston Martin comenzó pegando por encima de su potencial técnico, de estructura y medios. Pero el largo recorrido le iría poniendo en su sitio. La complejidad de rendimiento de los monoplazas de efecto suelo ha roto cabezas en todos los equipos. El británico, sin embargo, ha caído como una piedra desde aquella segunda mitad de 2023.

Los circunloquios de Alonso

Al margen del crono a una vuelta o de las simulaciones de carrera, de que otros rivales sean más veloces, un equipo destila un determinado jugo en la pretemporada. El de Aston Martin se antoja escaso. Preocupante, en una palabra. Basta comparar con la fluidez de trabajo en Williams o Alpine, por ejemplo.

La pasada semana, Alonso completó 162 vueltas, con solo cuatro pilotos por detrás en este dato, uno de ellos, su compañero Stroll (con enfermedad el último día). Aston Martin terminó en penúltimo lugar. Ni una sola vuelta rápida lanzada, ninguna simulación de carrera. Sin señales que transmitieran una progresión del AMR25 frente al pasado año.

Un abismo separa la percepción global de Aston Martin esta pretemporada de aquella de 2023. No por la posición jerárquica, imposible hoy, sino por la desorientación transmitida desde el equipo británico y los circunloquios de Alonso para describir el estado de la situación. Una retórica ya conocida. Pocos equipos y pilotos tienen todas las respuestas tras solo tres días. Aunque desde Aston Martin, pocas o ninguna. Ni siquiera pistas.

El AMR25 introducía modificaciones aerodinámicas para paliar la rebeldía de su predecesor, de impredecible comportamiento aerodinámico según la fase de la curva al frenar, levantar el pie, ángulo de giro, curva lenta o rápida… El AMR24 resultaba impredecible para sus pilotos. El objetivo de esta versión era domar al potro. Coche impredecible, coche que puede perder.

"Tenemos algunos puntos positivos en el monoplaza, los datos y la correlación parecen buenos y hay un paso adelante en comparación con el coche del año pasado", era una de las sentencias finales de Alonso, junto a otras por el estilo. "Fútbol es fútbol, los partidos duran 90 minutos, no hay equipo pequeño". Otras variaciones sin poder certificar progresión -o posición- alguna frente a sus rivales.

De modo, que mejor ir avisando al personal. "Es difícil creer que las cosas vayan a cambiar tanto en comparación con Abu Dabi, digámoslo así. Creo que las primeras cuatro carreras serán similares a Abu Dabi". ¿Y el resto del campeonato? ¿Y si Aston Martin ya hubiera decidido que no compensa atender al AMR25, habida cuenta de la que se viene encima con el reglamento 2026? De momento, mejor descartar esta eventualidad.

Estos días se ha sabido que Ferrari ha demorado la llegada de Enrico Cardile, el futuro director técnico de Aston Martin, y una de las cabezas de su organigrama. Será en julio. ¿Quién lidera al trabajo con el 2025? Dada la situación, Adrian Newey tendrá que pasar consulta al enfermo. Quizás tenga margen de maniobra para un tratamiento de emergencia. De lo contrario, puede ser esta una temporada muy larga para Fernando Alonso. Qué tiempos aquellos, en 2023.

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